Notas de prensa
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Endocrinólogos y cardiólogos deben trabajar conjuntamente para reducir las muertes cardiovasculares en los pacientes con diabetes tipo 2
El tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 (DM2) se encuentra a las puertas de un cambio de paradigma. En el nuevo escenario el paciente es sometido a un control integral y multifactorial, que es llevado a cabo conjuntamente por endocrinólogos y cardiólogos, juntamente con otros especialistas como los médicos AP, internistas, etc… Este cambio de paradigma ha sido uno de los focos de atención del encuentro INNOVA DM2 ENDO+CARDIO. El evento, organizado por la Alianza Boehringer Ingelheim y Lilly en Diabetes, ha reunido a más de 300 endocrinos y cardiólogos de toda España los días 16 y 17 de marzo en Sevilla.
El tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 (DM2) se encuentra a las puertas de un cambio de paradigma. En el nuevo escenario el paciente es sometido a un control integral y multifactorial, que es llevado a cabo conjuntamente por endocrinólogos y cardiólogos, juntamente con otros especialistas como los médicos AP, internistas, etc… Este cambio de paradigma ha sido uno de los focos de atención del encuentro INNOVA DM2 ENDO+CARDIO. El evento, organizado por la Alianza Boehringer Ingelheim y Lilly en Diabetes, ha reunido a más de 300 endocrinos y cardiólogos de toda España los días 16 y 17 de marzo en Sevilla.
“Hemos pasado de una visión glucocéntrica, en la que sólo se tenían en cuenta los niveles de glucosa, a una visión adipocéntrica y a un control integral del paciente”, explica la Dra. Sharona Azriel, médica adjunta de Endocrinología y Nutrición en el Hospital Infanta Sofía de Madrid y una de las ponentes de la jornada. “En el momento actual uno de los cambios del paradigma del tratamiento de la DM2 es que a la hora de elegir un fármaco antihiperglucemiante, además de tener en cuenta la edad y el peso del paciente, entre las comorbilidades que presenta tanto la enfermedad cardiovascular establecida como la enfermedad renal diabética, condicionan una selección particular con fármacos que pueden prevenir nuevos eventos cardiovasculares”, añade la experta.
“Los pacientes no tienen diabetes o problemas cardiacos. Los pacientes deben ser entendidos globalmente, con sus problemas y situaciones específicas y debemos ofrecerles los resultados en salud que les importan a ellos, más allá de cuál sea la visión de cada uno de los especialistas que abordan problemas específicos”, afirma el Dr. Julio Mayol, profesor titular de Cirugía de la Universidad Complutense de Madrid, Director Médico del Hospital Clínico San Carlos y ponente del encuentro.
Se estima que cada 6 segundos muere una persona con DM2 en el mundo, siendo los eventos cardiovasculares la primera causa de mortalidad entre este colectivo de enfermos1. La esperanza de vida de un paciente con DM2 es de 6 años menos que una persona sin DM2 y en el caso de que el paciente haya tenido un evento cardiovascular, su esperanza de vida es de 12 años menos. Aproximadamente el 50% de las muertes de personas con DM2 en todo el mundo se deben a enfermedad CV2,3.
Ante estas cifras, “los nuevos fármacos que incluyen empaglifozina tienen unos beneficios adicionales en cuanto a reducción de muerte cardiovascular, representan un gran hito en la historia del tratamiento de la DM2”, asegura la Dra. Azriel. “Estamos consiguiendo que haya menos mortalidad cardiovascular por tanto suponen una gran revolución”, añade la endocrina.
La innovación en el tratamiento de la DM2
Los avances en innovación en el tratamiento de la DM2 han sido el otro gran foco de atención del encuentro INNOVA DM2 ENDO+CARDIO. “La innovación debe llevarnos al uso de los datos no para el control de la DM2, sino para conseguir los resultados que cada uno de los pacientes pretende obtener. Para ello, resulta imprescindible que se produzca una transformación a una medicina 5P: preventiva, participativa, predictiva, personalizada y poblacional”, explica el Dr. Mayol.
En cuanto al papel de las nuevas tecnologías, el Dr. Mayol opina que “deben ayudarnos a proporcionar adecuadamente el ciclo completo de asistencia y a medir el valor que proporcionamos en la provisión de servicios sanitarios a los pacientes. Para ello, deberán facilitar la construcción de herramientas que ayuden a la toma de decisiones por parte de gestores, clínicos y pacientes”.