Desde  que comenzaron a aparecer las primeras farmacias modernas, esta clase de establecimientos han sido hasta hace pocos años lugares a los que se llegaba con la receta médica, se dispensaba el  producto, se pagaba y uno se iba, no había mucho más trato que el dispensado por el farmacéutico o farmacéutica si eras cliente asiduo.  

Toda aquella parafernalia ha ido cambiando con el paso del tiempo y hoy en día no son aquellos lugares tan fríos sino todo lo contrario, la gestión de farmacias es diferente así como la atención dispensada, los productos, la decoración… todo.

Con el paso del tiempo la cantidad de marcas y productos ha ido en aumento y nació el concepto de parafarmacia con el que además de los tradicionales medicamentos se empezaron a vender productos para los que no era necesaria receta médica y artículos de higiene, alimentación, cosmética, etc., los cuales representan un volumen de facturación muy a tener en cuenta por todas las farmacias que cuentan con este servicio.

Gracias al paso del tiempo y a los avances tecnológicos en todos los campos, especialmente con la llegada de Internet, se han ido aplicando diferentes técnicas de marketing con el objetivo de mejorar notablemente en las cuentas de explotación así como ofrecer nuevos productos, fidelizar a los clientes y muchos otros puntos a tener en cuenta en las farmacias de hoy en día.

Todos los aspectos se cuidan al máximo para poder proporcionar una experiencia de compra al cliente única y diferenciadora, prestando especial atención a los cambios de temporada y no ofrecen productos de fuera de temporada a no ser que sean casos de ofertas. Por ejemplo, para mejorar las ventas y diferenciarse de otras farmacias las farmacias actuales están innovando continuamente y ofreciendo productos diferentes que los que puede tener la competencia.

También cuidan otros detalles como la atención al cliente, hoy en día mucho más cercana y profesional que hace unos cuantos años, porque que el cliente se sienta a gusto y que confíe en los profesionales es parte del proceso de fidelización, algo que no se tenía demasiado en cuenta hace unos cuantos años.

Internet es otra de las novedades más importantes que han irrumpido en el mundo de la farmacia. Con el boom allá por el año 1996 era muy difícil encontrar una web de farmacia y tímidamente con la llegada de la década del 2000 fueron cada vez más las que comenzaron a crear webs para diversificar su negocio en otro nicho de mercado.

Hoy es raro encontrarse con una que no tenga una web, un blog, presencia en las redes sociales o las tres cosas a la vez, porque los farmacéuticos son conscientes de que generar una buena imagen, tener presencia y posicionamiento en Internet y promocionarse mediante la red es casi tan importante como hacerlo en la vida real.

Son tan solo algunos pequeños detalles que revelan ese importante cambio que han sufrido las farmacias desde hace unos cuantos años y que todos, en mayor o menor medida hemos experimentado en más de una ocasión.