La atención médica del futuro integrará un gran número de mejoras que sin duda llegarán de la mano de las nuevas tecnologías. A continuación se presentan algunas mejoras y puntos fuertes que sin duda estarán presentes, según los expertos, en la atención médica que se irá construyendo a lo largo de los próximos años.

Los ciudadanos como científicos

Lo primero que se deberá tener en cuenta en los sistemas sanitarios del futuro será que habrá que dejar de preocuparse por las enfermedades para pasar a preocuparse por la enfermedad. Hay que reinventar la asistencia sanitaria en cuanto a costes, unir las grandes cantidades de información que actualmente se encuentra fragmentada en un todo común.

Y sobre todo, se debe lograr implementar al máximo todas las oportunidades que las nuevas tecnologías brindan, aceptando a los ciudadanos y a un gran número de usuarios como científicos e impulsores de la sanidad y logrando así reinventar el sistema sanitario y la medicina, para que todo sume y los ciudadanos no terminen convirtiéndose en enemigos del sistema de salud, sino en parte de la solución de los problemas, aportando ideas, conocimientos e incluso descubrimientos que sean valorados, e implementados por los gobiernos y los laboratorios.

La importancia de la teleasistencia médica

No cabe ninguna duda que los servicios de asistencia 24 horas pasarán a formar parte de la asistencia médica del futuro. Con teleasistencia se hace referencia a un servicio 24 horas que permitirá a los enfermos del futuro estar conectados durante todo el día de forma directa con un gran equipo de profesionales sanitarios. En muchos casos, con sólo pulsar un botón bastará para poder recibir asistencia inmediata y de calidad ante cualquier situación de riesgo o emergencia.

"Este tipo de asistencia funcionará tanto desde la vivienda como del exterior y permitirá a los usuarios hablar de forma directa con el personal médico, que será el encargado de resolver todos los problemas de forma telemática e inmediata, enviando profesionales al lugar indicado si se considera necesario, en casos de emergencia o de urgencia", nos dicen desde CALLmed, empresa especializada en atención médica y sanitaria a distancia. Sin duda se trata de una opción ideal para aplicarla en el día a día que hará evolucionar en gran medida a la asistencia médica y que debería pasar a formar parte de los servicios médicos tradicionales del futuro en pocos años. Además, para casos de urgencia en que los usuarios no puedan activar estas llamadas, también se crearán determinados protocolos para que una unidad de urgencia pueda acudir inmediatamente al lugar desde el que se haya emitido la alerta.

Menos pastillas y más aplicaciones

Actualmente ya existen un gran número de aplicaciones diferentes para cada tipo de enfermedad. Los diabéticos ya pueden monitorear sus propios niveles de azúcar mediante sus smartphones. Las personas que tienen sobrepeso pueden realizar un seguimiento de su dieta y las embarazadas también tienen sus propias apps. Hasta se pueden acoplar manguitos a los teléfonos móviles para tomar la tensión y existen diferentes pulseras capaces de monitorizar muchas enfermedades, e incluso patrones de sueño y pulsaciones. Así bien, los expertos consideran que los médicos del futuro recomendarán mucho más estas tecnologías (como por ejemplo, en el caso de una persona a la que se le recete realizar una dieta saludable y empezar a hacer ejercicio para perder peso) que las actuales pastillas o los medicamentos, para así lograr controlar y monitorizar la salud de sus pacientes. Esto, por supuesto, abre un debate en el que algunos doctores y administraciones se encuentran a un lado, totalmente a favor, mientras que otros prefieren limitar su uso ya que consideran que muchas de ellas pueden ir un paso más allá e invadir de forma severa la privacidad de los usuarios. Sea como sea, seguro que las nuevas tecnologías juegan un papel muy importante a la hora de determinar el futuro, y la calidad, de los sistemas sanitarios que se desarrollarán en los próximos años.