En una tarde de compras se pueden perder hasta 0,6 litros de líquido

Madrid, 16 de diciembre de 2008.- La Navidad, a pesar de las bajas temperaturas, es uno de los momentos del año en que puede aumentar el riesgo de sufrir una deshidratación. Con el frío se tiende a beber menos y a estar menos pendiente de los líquidos que se pierden. Sin embargo, durante estas fechas se realizan numerosas actividades y se pasan muchas horas haciendo compras. Si bien debido a las bajas temperaturas se utilizan prendas de abrigo, la fuerte calefacción de los establecimientos, las prisas, el nerviosismo, las aglomeraciones, etc. hacen que aumente la sudoración. Así, en una tarde de compras se puede perder hasta 0,6 litros de líquido.

Con estas fiestas también se multiplican las actividades de ocio y las reuniones sociales que hacen que se descuide la dieta y se abuse del alcohol, que además tiene efectos diuréticos, y de comidas copiosas, con exceso de grasa. Por ello, es habitual que después de estos excesos se tenga sensación de sed. Esto es síntoma de que se está sufriendo algún tipo de deshidratación, por lo que hay que ingerir, además de agua, infusiones, refrescos, zumos, lácteos, caldos, etc. para reponer las pérdidas hídricas.

La deshidratación puede provocar cansancio, dolor de cabeza, malestar y, en general, puede afectar negativamente a las capacidades físicas y mentales.

Recomendaciones del Observatorio de Hidratación y Salud (OHS)

Para evitar las consecuentas de la deshidratación durante estas Navidades, los expertos aconsejan:

- Desprenderse de prendas de abrigo cuando se va a pasar tiempo en recintos cerrados y con calefacción, ya que la sudoración hace que se pierda el equilibrio hídrico.

- Mantener un consumo regular de líquidos, ya que las bajas temperaturas pueden hacer que no se sienta sed, lo que no implica que el organismo este correctamente hidratado. Llevar una botella de bebida ayuda a recordar que se deben beber pequeñas cantidades cada poco tiempo.

- Ingerir frutas y verduras en la dieta diaria (al menos 5 raciones) ya que son alimentos con gran contenido hídrico que contribuyen a mantener una correcta hidratación.

- Incluir distintas bebidas ayuda a que la ingesta total sea la adecuada. Además de agua, las infusiones, refrescos, zumos, lácteos, caldos, etc. facilitan beber lo necesario. El sabor de las bebidas también estimula un mayor consumo de líquidos.

- Evitar el alcohol, pues su efecto diurético hace que se necesite beber más líquido para contrarrestar esa deshidratación.

Observatorio de Hidratación y Salud (OHS)

El Observatorio de Hidratación y Salud (OHS) es una institución de carácter científico-técnico que surge de la necesidad de mejorar el conocimiento en torno a la hidratación y profundizar en sus aspectos sanitarios. Con este fin, promueve proyectos de investigación y recopila información, estudios y bibliografías relacionados con este área. A su vez, fomenta la divulgación para concienciar a la población de la importancia de adoptar hábitos saludables y, de este modo, prevenir problemas de salud asociados a la deshidratación.

Dentro de esta labor informativa, el OHS cuenta con la Web www.hidratacionysalud.es, donde se puede encontrar información de utilidad y consultar las dudas a un especialista. Esta Web de la hidratación, primera de sus características en Europa, es de carácter científico y divulgativo.