Barcelona, 18 de diciembre de 2012. La Clínica Eugin presenta la “Guía masculina sobre fertilidad” con el fin de apoyar a los hombres que están realizando un tratamiento de fertilidad con su pareja. Los estudios demuestran que los varones suelen estar centrados en el bienestar de la mujer, ya que ella ocupa el centro de todo el proceso, de modo que ellos pueden llegar a ocultar sus propios sentimientos. Al adoptar este papel de  apoyo a su pareja, es el hombre quien suele quedarse sin respaldo propio.  

Teniendo en cuenta que la infertilidad afecta por igual a hombres y mujeres (el origen es femenino en el 40% de los casos, mientras que masculino en otro 40% y compartido o desconocido en un 20% restante) y, que en España, afecta entre al 10 y el 15% de las parejas, es necesario que ambos se preparen para un tratamiento de reproducción asistida. Únicamente el 32% de las parejas consigue el embarazo con un solo ciclo de tratamiento y, a menudo, se recomiendan hasta tres ciclos, lo que puede suponer un gran desgaste emocional para la pareja. 

Por todos estos motivos y con el pleno convencimiento de prestar apoyo a la figura del hombre la Clínica Eugin presenta la primera “Guía masculina sobre fertilidad”. Y es que, a pesar de que es la mujer la que recibe el tratamiento, para los hombres también puede resultar muy difícil hacer frente a estos ciclos. Dolors Cirera, psicóloga clínica de la Cínica Eugin, remarca que “durante un proceso de este calado es imprescindible una buena comunicación de pareja. Ser capaz de compartir tanto los sueños como los miedos,  intentar mantener la rutina diaria habitual y no descuidar nunca la relación, resultan factores esenciales”. De la misma manera, recuerda que “es posible que otras personas no entiendan por lo que el hombre está pasando, que éste se sienta presionado por sus amigos o no sepa qué decir cuando quizás tenga que ausentarse de su trabajo para acudir a las citas. Puede que incluso esté más nervioso de lo habitual. Pero es imprescindible no olvidar que ser padre es un proyecto en común con su pareja”. 

En general, Cirera argumenta que “el hombre no suele estar preparado para el impacto emocional que supone la infertilidad, para algunos es incluso difícil reconocer sus propios sentimientos y saber el rol que deben desempeñar durante el tratamiento. Es realmente importante ser sinceros y asertivos, es decir, capaces de dar pero también de pedir al otro el apoyo  que cada uno necesite”. Por ello, es recomendable que si no saben cómo expresarlo,  empiecen  intentando escribir ya sea  en un correo electrónico o a través de una carta para exteriorizar así sus emociones. 

En este sentido, la Clínica Eugin ofrece asesoramiento especializado para tratar específicamente los temas relacionados con los tratamientos de fertilidad, ayudando a proponer soluciones y formas de afrontarlas. 

La importancia de estar preparado en pareja 

Por todo ello, es importante estar preparado para lo que pueda suceder: los efectos secundarios temporales que puede sufrir la mujer en tratamiento de reproducción asistida (como dolores de cabeza, náuseas o aumento de peso), cansancio general o a cambios en la vida sexual que afectan a la vida conyugal. Ella puede tener que someterse a inyecciones hormonales que pueden tener efectos secundarios; además, las citas en la clínica de fertilidad a veces no pueden planificarse, ya que dependen de su respuesta al tratamiento. Esta falta de control puede resultar muy difícil de manejar. 

Esta Guía masculina sobre la fertilidad, que presenta la Clínica Eugin, propone, entre otros consejos, realizar una lista con todas las preguntas que se desea realizar al médico, desempeñar un papel activo en las visitas, así como recordar que los dos miembros de la pareja están pasando por un momento difícil o ser positivo y recordar que la unión hace la fuerza. 

La Dra. Valérie Vernaeve, directora médica de la Clínica Eugin, apunta que “es importante destacar que las dificultades a la hora de tener hijos conllevan cierta tensión emocional y, en algunos casos, elevados niveles de estrés y ansiedad. Por esta razón, entendemos que es muy importante  escuchar, comprender y sobre todo ayudar a nuestros pacientes en este momento de su vida”. Como herramienta de ayuda, la especialista destaca que el objetivo de la Clínica Eugin con la `Guía masculina sobre fertilidad´ ha sido “convertirse en apoyo para todas las parejas que afrontan un tratamiento de este tipo. España, como el resto de Europa, tiene una alta tasa de mujeres que dan a luz con más de 40 años”. 

En cualquier caso, cada pareja es un caso único. Por esta razón, la guía incluye testimonios reales de pacientes españoles que se han sometido a una técnica de reproducción asistida. En ellos se puede comprobar como cada pareja ha tenido que pasar por diferentes etapas complicadas y cómo una vez que han sido padres, cada obstáculo superado ha reforzado la relación. 

Sobre la Clínica Eugin 

Desde su creación en 1999, la Clínica Eugin, ubicada en Barcelona, ha ayudado a construir más de 10.000 familias en toda Europa. En este tiempo, se ha convertido en el primer centro de reproducción asistida de Cataluña en cuanto a número de tratamientos realizados y en uno de los primeros centros de Reproducción Asistida Europeos. 

La clínica ofrece la ventaja exclusiva de realizar un diagnóstico online que contribuye a eliminar las listas de espera y hace más cómodo todo el proceso. Esta inmediatez ha permitido que algunas de las pacientes se hayan quedado embarazadas en menos de un mes. 

Además, el centro cuenta con el Certificado de Calidad Total de la certificadora alemana TÜV, convirtiéndose así en el primer centro europeo de Reproducción Asistida que cuenta con esta distinción. 

En términos nacionales, además de contar con certificaciones ISO de calidad, la Clínica Eugin se ha convertido en la primera clínica de tratamientos de reproducción asistida en España en sumar a su sistema de seguridad una nueva tecnología que aumenta su riguroso proceso de seguridad. De esta manera, demuestra nuevamente su compromiso por el bienestar de los pacientes.