Barcelona,7 de noviembre 2007 - "Tres millones de personas en todo el mundo mueren de SIDA cada año". Esta contundente cifra es una de las cartas de presentación de esta enfermedad a la que 'Visiones de la Ciencia' dedicó la quinta conferencia del ciclo 'Sexo, placer, reproducción y salud'. Patricia García de Olalla, médica de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), ejerció de guía por los datos epidemiológicos de una de las lacras del siglo XX. La conferencia organizada por la Direcció de Promoció de Cultura Científica del Institut de Cultura de Barcelona (ICUB) y la Xarxa de Biblioteques en el marco de Barcelona Ciència 2007, contó con la colaboración del Instituto Novartis de Comunicación en Biomedicina (INCB).

Como responsable del registro de las enfermedades de transmisión sexual y del SIDA en Barcelona, la Dra. García de Olalla realizó un dibujo del estado del VIH en el mundo y, en especial, de las características propias de la ciudad condal. En primer lugar, la especialista señaló que se ha avanzado mucho en las expectativas de vida, especialmente gracias al tratamiento con anti-retrovirales. "En los años 80, menos del 50 por ciento de los enfermos de SIDA sobrevivían dos años después de que se les declarase la enfermedad. Actualmente el 80 por ciento de los enfermos sobreviven a los cinco años", destacó.

En muchas ocasiones el problema es que el tratamiento tarda mucho en aplicarse por la propia naturaleza del virus: "A diferencia de otras infecciones, el VIH tarda de ocho a diez años en mostrar síntomas en una persona afectada y, por lo tanto, la gente no siempre es consciente de que padece la enfermedad. Esta situación hace que se tenga que diferenciar entre una persona infectada del virus VIH (seropositiva), que no ha desarrollado ninguna enfermedad relacionada, y un enfermo de Sida. Este último sería una persona seropositiva que además ha desarrollado alguna de las enfermedades relacionadas con el virus (sarcoma, neoplasias.), explicó García de Olalla.

En este contexto, la vacuna contra el Sida sigue siendo uno de los objetivos de la investigación biomédica desde que se detectó el primer caso a finales de los años 70 en los Estados Unidos. Sin embargo, esta meta todavía parece lejana: "Actualmente se está investigando una vacuna terapéutica en lugar de una vacuna preventiva, que sería la que evitaría la enfermedad. Los esfuerzos se aglutinan en el desarrollo de un fármaco que reduciría substancialmente la medicación de los enfermos".

Además de las expectativas de vida, con el paso de los años también han evolucionado muchos de los patrones tradicionales de la enfermedad. Por géneros, a pesar de que la mayoría siguen siendo hombres, "la tendencia tiende a equilibrarse. Sin embargo, se mantienen unos factores de riesgo diferentes: para los hombres son las relaciones homosexuales y para las mujeres, las heterosexuales", señaló. En este sentido, la especialista del ASPB apuntó también algunos de los patrones ligados a la nueva inmigración. "La vía de contagio de esta enfermedad está fuertemente relacionada con el lugar de origen. Así, casi el 100 por cien de los inmigrantes subsaharianos que han contraído la enfermedad, se han contagiado por la vía de las relaciones sexuales. Por otro lado, la principal vía de contagio de los inmigrantes llegados desde los países del este de Europa son las jeringuillas utilizadas para el consumo de drogas por vía intravenosa", explicó.

García de Olalla terminó esta panorámica del Sida en Barcelona señalando a Ciutat Vella como el distrito con la más alta tasa de afectados. Y en cuanto al momento del contagio, la edad media en que se contrae la enfermedad se sitúa alrededor de los 45 años, pero "esta edad parece que tiende a aumentar". Todos estos casos se incluyen en las cifras globales de una epidemia que se calcula afecta ya a "unos 40 millones de personas en todo el mundo, de los cuales un 75 por ciento se encuentran en el África Subsahariana", concluyó.

Instituto Novartis en Comunicación en Biomedicina (INCB)

El Instituto nace con el propósito de promover, articular y desarrollar actividades de complemento a la docencia, investigación, formación, información y documentación en el ámbito de la Comunicación en Salud y Biomedicina. Asimismo aporta, comparte y divulga el conocimiento, a través de medios actuales y nuevas tecnologías emergentes. El INCB, promovido por Novartis Farmacéutica, supone una manifestación más de la voluntad y compromiso de Novartis dentro del entorno de la salud y de su voluntad innovadora y de aportación de valor añadido en todos aquellos aspectos de relevancia e interés para la sociedad en general. Asimismo, viene a reforzar el compromiso de innovación y responsabilidad de esta Compañía en España.

Entre sus prioridades se encuentran potenciar tanto la formación de profesionales de la comunicación, como fomentar y realizar programas y actividades de difusión de contenidos de salud, demandados cada vez más por parte de pacientes y de la sociedad en general. Este hecho supone un paso decisivo en la ayuda a la concienciación del valor y sostenibilidad de los sistemas sanitarios y de su dimensión real para los usuarios.