Notas de prensa
- Oncología
- General
El 30% de los problemas a los que se enfrentan los médicos no son técnicos, sino éticos, según los autores del primer libro sobre Bioética y Oncología de España
Los oncólogos apuestan por integrar la bioética en su día a día, frente a la actual visión mecanicista de la enfermedad, que olvida la situación personal y emocional del paciente
Los autores de la publicación defienden que parte de la labor del oncólogo es mostrar empatía al paciente, conocer sus valores y creencias, saber acompañar, aprender a dar malas noticias o aplicar el concepto de “verdad soportable”
Más de la mitad de los oncólogos de España han manifestado explícitamente la necesidad de formarse en bioética según una reciente encuesta, lo que demuestra la importancia de poner en práctica esta disciplina
Santiago de Compostela, 29 de junio de 2017 – Humanizar la asistencia oncológica es uno de los grandes retos de esta especialidad médica en el siglo XXI. Los médicos deben tener en cuenta los valores, creencias y situación personal de los pacientes con cáncer para mejorar la atención que les prestan y conseguir así un manejo más integral de la enfermedad. Así lo ponen de manifiesto los autores del libro “Bioética y Oncología. Una puerta abierta a la oportunidad”, una iniciativa de la Sociedad Oncológica de Galicia (SOG) que cuenta con el apoyo de la compañía Takeda, y que se ha presentado en el Colegio de Médicos de Santiago de Compostela. Tres Oncólogos gallegos y un Bioeticista han editado este texto pionero, el primero que trata en España la relación entre Bioética y Oncología, cuyo objetivo es dar respuesta a más de la mitad de especialistas que, según una reciente encuesta de la Sociedad Española de Oncología Médica, manifiestan explícitamente la necesidad de formarse en esta disciplina.
“El 30% de los problemas que tiene un médico en su práctica clínica habitual no son técnicos, sino éticos”, asegura el Dr. Francisco Barón, Facultativo Especialista de Área de Oncología del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña y coautor del libro. “Y sin embargo, la formación que recibimos es fundamentalmente técnica. La ética y el humanismo se consideran una pérdida de tiempo, competencias `blandas´ frente a la visión mecanicista de la enfermedad”, indica el oncólogo, para quien los principales problemas y conflictos del día a día “surgen cuando se quiere resolver un problema ético con herramientas técnicas”.
El autor defiende que técnica y bioética deben ponerse en práctica de forma paralela y de un modo sinérgico y complementario, de forma que la atención al paciente sea integral. “La parte afectiva y emocional es muy importante, porque el paciente está viviendo una situación grave que puede llegar a comprometer su vida. Si no nos preocupamos por los enfermos ni somos capaces de ponernos en su lugar y ser empáticos, no vamos a ser buenos oncólogos”, sentencia el Dr. Barón.
De ahí que los autores defiendan que es fundamental recuperar la ética y que los oncólogos se formen en comunicación empática, acompañamiento al paciente, o aprender a dar malas noticias, como parte de la labor clínica que deben desempeñar. “Tenemos que conocer la intimidad de los tumores para tratarlos mejor, pero también tenemos que conocer la intimidad de las personas que portan el tumor. Los oncogenes se encuentran en personas, seres humanos que sufren, que tienen miedo, que tienen dolores, y que tienen necesidades”, afirma el Dr. Barón.
Importancia de la bioética en las decisiones del paciente
El libro, dividido en 15 capítulos, dedica una primera parte a delimitar los principios antropológicos, culturales y éticos de la bioética, para así poder comprender las consecuencias que se derivan de ellos y que conforman la segunda parte del libro. En esta segunda parte, se desgrana la importancia de las decisiones compartidas con el paciente, la atención al paciente pediátrico, la atención cerca del final de la vida o la confidencialidad, entre otros muchos asuntos.
La bioética tiene numerosas implicaciones en la atención al paciente, como por ejemplo, la elección del tratamiento. “Cuando el paciente tiene que elegir entre opciones terapéuticas parecidas, no elige solo en base a un oncogen, sino también considerando sus creencias, sus valores, su situación personal, social, familiar, si vive solo o acompañado, si tiene una actitud vital arriesgada o conservadora… cuestiones que son muy importantes y que el oncólogo suele pasar de puntillas”, explica el Dr. Barón.
Además, el autor defiende la importancia de decidir con el paciente, no por él, y señala que para ayudarle a tomar la decisión adecuada es necesario conocer su biografía, características de su entorno, situación personal o y valores. “Pero esto es difícil de hacer si por ejemplo no hay continuidad asistencial, o si el médico considera que los valores del paciente no son tan importantes como las características de su tumor”, explica el doctor. “La vocación de servicio al enfermo se va perdiendo si los médicos pensamos en la biología molecular como un fin y no como un medio”, añade.
Aunque la Bioética nació en los años 70, la formación de esta disciplina dentro del campo de la Oncología es todavía algo incipiente, algo que los autores instan a cambiar. “Ha costado mucho integrarlo en la cartera de servicios, en la formación, en el corpus de la oncología que, por una gran inercia de la medicina en general, se ha tecnificado”, señala el Dr. Barón. Los autores del libro defienden que, aunque el desarrollo de la bioética es lento frente al de las técnicas de la biología molecular, es fundamental invertir recursos en ella para lograr una mejor atención al paciente a largo plazo.
Además del Dr. Barón, los autores que han participado en el libro son José Ramón Amor Pan, Director de Relaciones Institucionales de la Fundación Hogar Santa Margarita y miembro del Comité de Ética Asistencial del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, la Dra. Alexandra Regueiro García, médico del Servicio de Hematología y Oncología Pediátrica del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS), y la Dra. Francisca Vázquez Rivera, adjunto especialista en Oncología Médica del CHUS.
Acerca de la Sociedad Oncológica Gallega
La Sociedad Oncológica de Galicia es una Asociación médica de ámbito autonómico. Su objeto o finalidad primordial es el estudio y la investigación de la enfermedad neoplásica y procurar la homologación de criterios clínico-terapéuticos en el diagnóstico y tratamiento de la misma. Actualmente cuenta con un total de casi 170 socios.
Acerca de Takeda Pharmaceutical Company
Takeda Pharmaceutical Company Limited es una compañía farmacéutica global basada en la I+D comprometida con ofrecer un futuro mejor y más brillante a los pacientes, convirtiendo la ciencia en medicamentos que cambian vidas. Takeda concentra sus esfuerzos de investigación en las áreas terapéuticas de oncología, gastroenterología y sistema nervioso central, además de vacunas. Takeda trabaja en I+D tanto a nivel interno como con colaboradores, con el fin de mantenerse a la vanguardia de la innovación. Los nuevos productos innovadores, especialmente en oncología y gastroenterología, así como su presencia en los mercados emergentes, impulsan el crecimiento de Takeda. Más de 30.000 empleados de Takeda están comprometidos con mejorar la calidad de vida los pacientes, trabajando con colaboradores en el sector de la salud en más de 70 países. Para más información, visite http://www.takeda.com/news