Notas de prensa
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La Sociedad Española de Neurología confía en que la paralización del Real Decreto de Troncalidad permita adecuarlo a la realidad vigente en Europa
- La SEN está analizando el contenido con su gabinete jurídico.
- A la SEN le produce mucha preocupación el actual borrador del decreto.
12 de junio de 2014.- La Sociedad Española de Neurología (SEN) confía en que el anuncio, por parte del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, de que el borrador del Real Decreto de Troncalidad pasará una vez más por el Consejo de Estado, permita a las autoridades realizar los cambios necesarios para que el decreto sea aquel que necesita la formación especializada en medicina y más en concreto en Neurología.
“Desde la SEN vemos razonable esta nueva paralización del decreto, ya que el contenido del documento que ha estado circulado, de ser el definitivo, sería muy preocupante”, señala el Dr. Alfredo Rodríguez-Antigüedad, Presidente de la SEN. “Algunas sociedades, entre las que se incluye la propia SEN, lo estamos analizando con nuestros gabinetes jurídicos”.
La Sociedad Española de Neurología se muestra contraria a la inclusión de la Neurología en el tronco médico porque considera que la investigación y la proyección internacional de la Neurología española, así como la atención al paciente pueden verse seriamente dañados. Así pues, desde la SEN se espera que esta nueva revisión por parte del Consejo de Estado, permita que la Neurología o no sea una especialidad troncal, o se cree una troncalidad específica en neurociencias donde pueda ser incluida.
“Llevamos varios años señalando nuestra preocupación porque el cambio del modelo formativo de especialistas que plantea la troncalidad suponga un gran retroceso en todo lo que se ha conseguido y una hipoteca para el futuro de la neurología”, explica el Dr. Alfredo Rodriguez-Antigüedad. “Por esa razón confiamos en que esta paralización del decreto permita que nuestra especialidad no se vea tan seriamente dañada y que sea la oportunidad para que se apueste por el desarrollo de las neurociencias. Solo así podremos asegurar que la calidad de los futuros profesionales y, por lo tanto, de su labor investigadora y de la atención a los pacientes, no se vea mermada”.