Despejar dudas. Eso es lo que acaba de hacer Asefarma, una de las Asesorías de Farmacias líderes de nuestro país http://http://www.asefarma.com/ y que cuenta con más de 300 boticas como clientes, al lanzar una serie de consejos a los farmacéuticos sobre cómo actuar ante una visita aleatoria de la Agencia Tributaria a su negocio. “Lo que tenemos que tener muy claro es que los Inspectores o Actuarios Tributarios son personas que están haciendo su trabajo y simplemente quieren verificar una serie de datos. Sea como fuere hay que destacar que son actuaciones de comprobación de sus obligaciones formales, y por tanto nada tienen que ver con una Inspección de Hacienda”, dice Alejandro Briales Casero, Director de Asefarma.. “Estas actuaciones inspectoras tienen carácter parcial de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 148 de la LGT y en el artículo 178 del RGAT, limitándose a la verificación del cumplimiento de las obligaciones formales del obligado tributario”, añade.

Pero, ¿para qué le sirve a la Agencia Tributaria dichas visitas? Asefarma lo explica a continuación:

- Para verificar los datos censales derivados de la actividad desarrollada en el local objeto de comprobación.
- Para comprobar la existencia de libros de contabilidad y registros fiscales. “Hay que dejar claro que en este tipo de revisiones los Inspectores quieren verificar la existencia de libros contables, pero no van a examinar su contenido”, subraya Briales.
- Para obtener datos, informes, antecedentes y justificantes con trascendencia tributaria propios o de terceros.

Por ello los Inspectores realizan preguntas como:

- Domicilio fiscal.
- Medios de pagos habituales a proveedores.
- Plazo medio entre la recepción de los medicamentos y el pago a proveedores.
- Medios de cobro utilizados habitualmente con los clientes.
- Si dispone de TPVs.
- Si el local es de su propiedad o está en régimen de alquiler…

Así las cosas, y en el caso de que en una de estas visitas se les pida documentación (tal y como facturas, libros, impuestos…) Asefarma recuerda a los boticarios que han de decir que ésta no se encuentra en sus instalaciones sino en la Asesoría correspondiente y que ha de ser a ella a la que los inspectores, en el caso de necesitarla, se la pidan. “Si aparecen por su oficina de farmacia siempre recomendamos que se pongan en contacto telefónico con la Asesoría para ayudarle a responder a todas las posibles preguntas que le puedan realizar”, finaliza Alejandro Briales Casero, Director de Asefarma.